En la región Valle, en Jalisco, se encuentra la comunidad de Magdalena, ésta a diferencia de muchas otras poblaciones jaliscienses, no se dedica al cultivo del agave ni a la producción del Tequila, sino a la explotación de ópalo, un mineral precioso con un juego de colores que le da una apariencia llamativa, a pesar de contener varios colores siempre hay uno predomina, por lo que puede haber amarillos, azules, blancos, entre otros; una de las características que hacen única cada pieza es que aún proveniendo de la misma piedra jamás será un ópalo idéntico a otro.

Así pues, uno de los principales atractivos de este lugar son las tiendas de ópalo, en las que encontrará diversidad de productos elaborados con este mineral, además de algunos otros hechos de obsidiana, turquesa y ágata.

Pero si desea una aproximación mayor al trabajo del ópalo, puede solicitar un tour por las minas, existen paquetes completos que incluyen alimentos y bebidas, además de poder participar de una degustación.

Aunque la actividad principal en esta comunidad es el trabajo de ópalo, es posible ver durante el trayecto uno de los paisajes más bellos que imaginará, grandes lineas de agave azul, esto les ha valido ser catalogados como Paisajes Naturales en la lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO.

Además de los anterior, cuenta también con una firme fuerza en sus culturas, tal es el caso de los huicholes, habitantes de San Andrés Cohamiata, situado en la cumbre de la sierra madre oriental, lo cual dificulta el paso para llegar hasta ahí, sin embargo son una comunidad con costumbres muy arraigadas y que respetan las jerarquías que entre ellos existe.