A finales del siglo XVIII se construyeron varias obras exteriores que aumentaron el radio de acción de plaza Campeche, una de ellas es este inmueble terminado el 9 de agosto de 1792, siendo teniente de rey don José Sabido de Vargas.
El Fuerte de San José puede considerarse como una obra perfectamente concebida, ya que cuenta con un foso, bóvedas de cañon corrido, aljibe y garitones que servian para la vigilancia del exterior.
Pueden observarse también el zaguán que funcionaba como vestíbulo, el cuarto de guardia, el dormitorio, la capilla, la cocina, el almacén de pólvora, merlones, un terraplén, troneras y una letrina.
El aljibe es un depósito de agua que se llena mediante recolectores, estos se encuentran en los vértices que dan al interior del patio central.
En la actualidad su espacio se encuentra destinado a albergar un museo con algunas armas, espadas y barcos de la epoca.